El Mayflower ya es una realidad y surca los mares. Un barco que es totalmente novedoso con una tripulación artificial y movido por un motor eléctrico híbrido movido por energía solar.
La nave cuenta con una longitud de 15 metros y 6,2 metros de ancho, es capaz de mover sus 5 toneladas a 10 nudos (unos 18 km/h). Con estas medidas y totalmente renovado, el Mayflower vuelve a surcar los mares 400 años después de que uniera los dos Plymouth existentes en el planeta, el de Reino Unido y el de Estados Unidos.
Construido en aluminio, el barco tiene un concepto de trimarán y, eso sí, su gran particularidad es que es completamente autónomo. El capitán y los marineros, en este proyecto de IBM y la organización sin ánimo de lucro ProMare, son sustituidos por una treintena de sensores, que se unen a seis cámaras con inteligencia artificial (IA), a 6 Jetson AGX Xavier, a dos Jetson Xavier NX, a ordenadores con base Intel, a sistemas de microprocesadores personalizados y sin olvidar al habitual sistema de navegación.