Nos acaba de dejar un año de incomparables retos y constante lucha por la salud. Un año de mucho aprendizaje, de mucha unión familiar y de mucho acercamiento en la distancia gracias a la tecnología al cual hemos tenido que adaptarnos obligatoriamente en todos los ámbitos. Sin embargo, también fue un año de lamentables pérdidas (laboral, educativo, salud y humanas), pero con muchos encuentros inesperados y acercamientos guardando la distancia.
El año 2020 quedará grabado en nuestras mentes por muchas razones, fue un año caracterizado por muchas muestras de empatía y solidaridad para salir victoriosos de esta guerra sin cuartel ocasionado por la pandemia. Fue un año, además, de mucha adaptación a las nuevas formas de vida donde se han perennizado nuevas palabras dentro de nuestro vocabulario habitual: alcohol, mascarilla, careta, lejía, mamelucos, distanciamiento social, lavado de manos, clases virtuales, home office, meetings, virtualización, confinamiento, oxímetro, entre otros.
Asimismo, frases como: “yo me quedo en casa”, “me alejo para cuidarte”, entre otras relacionadas con esta nueva normalidad que nos ha tocado vivir, pero también lo considero como el año del salto a la tecnología, al cual absolutamente todos hemos tenido que adaptarnos para seguir avanzando y “mantenernos vigentes” en el mercado. No fue un año tan malo, sino de mucho aprendizaje, adaptación y reinvención
Adaptar el negocio
Para nosotros fue un año de muchos retos donde tuvimos que adaptarnos a nuevas formas de hacer negocio, atención online, delivery, transacciones bajo plataformas virtuales, etc., donde hemos creado por necesidad nuevas líneas de negocio y servicios que tendremos que ir mejorando y puliendo en adelante para estar de acorde al nuevo formato de negocios impuesto de manera implícita por la actual coyuntura mundial.
Esta demás decir que el aprendizaje constante se ha vuelto más importante que antes y, para ello, hay un sinnúmero de medios y canales de comunicación, entre ellos las mismas marcas de tecnología que nos capacitan en forma constante y directa (virtual) o a través de los mayoristas. Ahora más que nunca nos toca a cada uno ser más competitivos que antes, y las herramientas están ahí, a la mano de todos y cada uno de los que realmente quieren seguir avanzando.
Aquí me permito citar a Inés temple ( sí, la del famoso best seller Usted S.A.) que en una columna del suplemento Dia 1 de El Comercio el pasado 7 de diciembre bajo el título: Diecisiete habilidades humanas para el 2021 escribe: “En un entorno tan cambiante, el año que viene presentará más de un desafío. Hay habilidades claves a desarrollar, y una de ellas es: nada como aprender a aprender más rápido, sobre todo, en temas vinculados con la tecnología digital. Es vital empezar a hacerlo ya mismo y sin miedo”.
2021: año de la resiliencia
Para el presente año 2021, recién celebrado, lo vemos con mucho optimismo, diría que es el año de la resiliencia, donde después del golpe mortal producto de la conocida crisis que nos dejó alicaídos tenemos que recuperarnos y recomenzar y cual ave fenix salir de los escombros y empezar nuevamente a volar.
¿Que necesitamos para ello? Mucha Actitud, mente positiva, voluntad extrema, y más que pensar hacer, ser creativos, volvernos innovadores con nuestros propios recursos, apostar por el conocimiento, darnos cuenta y sacar provecho de nuestras habilidades y buscar un propósito que redunde en el bienestar de uno y de todos a la vez, y para ello, el trabajo en equipo es lo que tenemos que afianzar. Ya no se trata de uno solo, se trata de todos.
Todo lo que podamos lograr depende única y exclusivamente de nosotros, a donde queramos llegar ahí podremos llegar, no dependemos necesariamente de las medidas que tome el Gobierno de turno, hay muchas formas de salir adelante y sí, recomiendo evitar a las personas negativas, pesimistas que solo saben estar sentadas eruptando negativismo puro transmitiendo que todo esta mal y no haciendo absolutamente nada.
Crisis es oportunidad
Todos hemos leído que crisis es equivalente a oportunidad, y es justamente lo que debemos apuntar a aprovechar, esta nueva oportunidad que nos da Dios para un nuevo comienzo con muchas alternativas. En lo que nos corresponde tenemos que estar preparados y apuntar a nuevas formas de negocio relacionadas todas exclusivamente con las tendencias en tecnología: realidad virtual, seguridad de los datos, migración de los datos a la nube, e-comerce, Internet de las cosas (IoT), As A Service, computing edge, analítica, marketing digital, big data, automatizacion, inteligencia artificial, etc.
Nos llegó de forma abrupta la tan esperada transformación digital, que tenemos que adaptarnos rápidamente a ella para poder sobrevivir en esta carrera digital que no tiene fin. Finalmente, hay una frase que dice: “En tiempo de crisis hay dos tipos de personas, los que lloran y los que salen a vender pañuelos”. ¿Qué eligen ustedes?
