Cercanos a la segunda década del siglo XXI, en el mundo en que vivimos es casi imposible organizar un día de actividades sin el uso de las tecnologías de la información, internet y comunicación (TIC). Transmitir videos, hacer llamadas locales o internacionales, enviar correos, compartir fotos, escuchar música, noticias o ver televisión son actividades que forman parte de la rutina diaria del 92 % de familias peruanas que al menos tiene una TIC en casa, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
Sin embargo, solo 28 de cada cien hogares cuenta con acceso a internet, según el reporte del INEI del cuarto trimestre del 2016. Aunque este servicio avanzó en cobertura unos 3,3 puntos porcentuales respecto al mismo periodo del año anterior, es claro que hay una brecha de conectividad por superar si ya casi la mitad de la población mayor de seis años usa este servicio.
Con el tendido actual de más de 13.500 kilómetros de la Red Dorsal Nacional de Fibra Óptica (RDNFO) y el despliegue de 21 proyectos de redes regionales (ocho de ellos ya concesionados), se espera expandir la cobertura de internet a las zonas más alejadas y remotas del país.
Esta mayor penetración de internet supone la expansión y el fortalecimiento de las industrias, lo que redunda en el crecimiento de la economía. Desde nuestro ingreso al mercado local hace 17 años, Level 3 ha sido partícipe de la expansión corporativa como aliado empresarial al ofrecer la implementación de servicios con estándar internacional. Tras inversiones en fibra óptica y la construcción de dos data centers, sabemos del apetito de las empresas por mayor seguridad y conectividad TI, que ha llevado incluso a que en dos años se haya incrementado en casi 60 % el tamaño de los datos llevados a la nube, como reflejan estudios de mercado de Huawei.
Los retos del tiempo presente implican continuar con el robustecimiento de la conectividad considerado factor clave para construir comunidad forjando la inclusión social y económica tal como indica el Foro Económico Mundial, también contribuirá con trasladar mejores servicios de salud y educación e incluso fortalecer las políticas de prevención de desastres gracias a la provisión de datos en tiempo real.
Con todas estas posibilidades de desarrollo tan cercanas a nosotros, podemos decir que las oportunidades para el progreso social del Perú están tan solo al alcance de un bit.