La importancia de saber transmitir la información

1268

Si la educación y la capacitación es importante para poder entregar valor en el servicio y soluciones, es también clave la forma cómo se recibe la información, cómo está estructurada para que el canal lo asimile, lo vuelva suyo y esté en la capacidad de transmitirla hacia el interior de su organización y hacia los clientes.

La información no es un problema cuando está estructurada y organizada según las necesidades de las personas y el rubro del negocio. Es un problema cuando ha sido almacenada o trasmitida de manera desordenada, sin estructura, generando un caos en el usuario.

Confusión y complejidad causa infidelidad
Imaginemos la cabeza de una persona que recibe una capacitación sin ton ni son, caótica y confusa. O se retira molesta, convencida de que la información no tiene valor, o se va convencida de que la solución es tan compleja que ni el mismo expositor (ejecutivo de la marca) tampoco la entiende. ¿Cómo se vende una solución o tecnología que no lo entiende ni Mandrake? ¡Ni el Chapulín colorado habla tan confuso como este pata!

A partir de esa confusión y molestia, podría tomar la decisión de abandonar a la marca e irse por otra que hace tiempo le está ofreciendo el paraíso, donde las hojas de los árboles son dólares esperando que alguien las coja.

Publicidad

Por eso, antes de empezar a quejarte de que ya no hay fidelidad en este mundo, mejor opta por preparar excelentes presentaciones, entender bien la tecnología que representas, y encuentra la forma de transmitirla de manera sencilla y brillante, a la vez. Vende lo que entiendes y dominas; abandona todo aquello que no puedes entender y con el cual no te sientes identificado. El sacrificio es para los fanáticos, el disfrute es para los seres humanos libres y con ganas de crear nuevas oportunidades. Con deseos de crear belleza.

No por ser simples las cosas dejan de ser espectaculares. La sensibilidad encuentra belleza donde los demás solo ven piedras. La espectacularidad siempre está cargada de ripio y abunda en extravagancias.

Una presentación sencilla y brillante es aquella en la que tú no terminas con dolor de cabeza, sudando frío, y rogando que llegue el último cuadro de tu PowerPoint. Si no te duele la garganta es porque has hablado naturalmente, sin necesidad de levantar la voz para llamar la atención. Notarás que has llegado al público cuando, paradójicamente, empieces a recibir preguntas elementales. Cuando escuchas que te tutean y no te ponen el escudo de usted. Ojo, siendo el usted una fina forma de tratarse con personas que recién nos conocemos, antes de pasar al tú, que es coloquial y generador de otros niveles de relaciones entre los seres humanos.

Notarás que has sido escuchado y comprendido, cuando de pronto estás rodeado por el público y te está pidiendo tu email, tu teléfono, o concretando una cita con tu equipo comercial que ha estado atento y divertido, con tarjeta en mano, y el discurso afinado para rematar la venta que hace tiempo solo espera una firma.

Notarás que estás siendo claro y transparente en tu discurso, cuando tú mismo te sientas satisfecho al ver el rostro enrolado, tranquilo y agradecido de tu auditorio. Es un paso hacia tu autenticidad cuando tu lenguaje se conecta contigo mismo y, por lo tanto, con aquellos que deseas impactar y mostrarles nuevas posibilidades.

1 COMENTARIO

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor introduce tu comentario
Por favor introduce tus comentarios