La modalidad de ciberataque ransomware, que afecta el sistema informático de una empresa para pedir luego un rescate por la información “secuestrada”, es un enemigo letal de las pequeñas y medianas empresas, así lo confirma un estudio de Osterman Reasearch, el cual señala que de 1,054 mil compañías encuestadas en junio, más de 220 se vieron obligadas a cerrar por el ciberataque.
El estudio reafirma la importancia de contar con protección contra este tipo de situaciones.
La investigación realizada en Norteamérica, Francia, Reino Unido, Alemania, Singapur y Australia, indica también que más de 350 de estas pequeñas y medianas empresas han sido víctimas de ransomware y 81% de ellas tuvieron algún tipo de experiencia relacionada a este programa dañino.
“Es fundamental que una empresa que maneja información importante, sobre todo, datos personales de sus clientes, se proteja frente a esta amenaza. El costo es mínimo si se compara con las pérdidas que ocasiona un ciberataque a la compañía” manifestó Ivan Chumo, gerente general de Optical Networks.
Y es que un ransomware puede dejar literalmente paralizada una empresa y el “tiempo muerto” es el verdadero asesino de un negocio. Según el estudio de Osterman Reasearch, una de cada 6 compañías que sufrieron este tipo de ataque tuvo que detener sus actividades por más de 25 horas.
«Optical Networks ofrece no solo un paquete completo de ciberseguridad corporativa a través de su producto Internet Seguro, sino también un servicio de asesoría personalizada realizada por un experto que primero conoce los procesos de la empresa presencialmente y propone un plan personalizado que se ajuste exactamente a sus necesidades», comentó Chumo.
“Invertir en ciberseguridad es necesario porque ni las instituciones privadas con menos de mil empleados están libres de sufrir un “secuestro de información”. No esperemos que un programa dañino como “Wanna Cry” nos alcance porque como ocurrió en ese caso el daño hecho no tendrá remedio”, finalizó Chumo.
